En estos días se cumplirá ya un año desde que irrumpió en nuestras vidas el torbellino de la COVID-19, afectando decisivamente a nuestras relaciones personales y sociales, y a nuestro tejido empresarial.
Muchas organizaciones han impulsado sus procesos transformadores para adaptarse con agilidad a la nueva realidad. Y, para ello, han podido contar con la ayuda de un magnífico equipo de consultores, proveedores y socios tecnológicos expertos en muy diferentes materias, con los que tengo la suerte de estar en contacto en mi día a día.
Una de las mejoras, sin duda, gira en torno al puesto de trabajo, y es un tema que se analiza con profundidad en un reciente informe sobre Puesto de Trabajo Digital y la revolución del Smart Working, desarrollado conjuntamente por la APD y Vodafone Business y en el que tuvimos, desde Microsoft, la oportunidad de participar.
El camino para el éxito transformador
En el informe se proponen seis pasos para abordar con éxito la transformación hacia el Puesto de Trabajo Digital: liderazgo; identificación clara de las necesidades; definición de los objetivos estratégicos; adopción de una nueva cultura organizacional; empezar poco a poco con pilotos para luego escalar los cambios; y, por fin, planificarse para el crecimiento futuro.
Y ¿Cómo hemos vivido desde Microsoft todos estos meses de cambios? Pues con muchísimo trabajo, agradecimiento e ilusión. Porque hemos podido comprobar cómo las empresas han depositado su confianza en nuestra tecnología, en nuestra plataforma de nube pública Azure, en nuestras herramientas de colaboración y productividad de Microsoft 365 y, más concretamente, en Teams. Han sido, definitivamente, protagonistas en estos meses, y estamos convencidos de que van a seguir siéndolo en adelante.
Porque, al fin y al cabo, estas tecnologías que defendemos con la ayuda insustituible de nuestros partners se han convertido en verdaderas habilitadoras del cambio, de la digitalización de las empresas. Y en todas ellas, hay integrados dos conceptos que quisiera destacar: inteligencia y seguridad.
Las herramientas inteligentes de Microsoft 365 están permitiendo agilizar y automatizar las actividades, crear flujos de trabajo cotidianos que impulsan la eficiencia, integrar información con procesos… impactando muy positivamente en la productividad.
Con respecto a la seguridad, el Smart Working no sólo debe ser trabajo flexible y productivo… también safe working. Porque las ciberamenazas están adaptándose también a estos nuevos entornos en los que los perímetros empresariales están cada día más difusos.
Afortunadamente, nuestras soluciones ofrecen protección contra amenazas y características avanzadas de administración de dispositivos. Contamos para ello con más de 3.500 expertos dedicados, en exclusiva a dotar de la máxima seguridad a todas nuestras soluciones cloud.
Con ellas, estamos ayudando a las empresas a redefinir su cultura corporativa en torno a modelos de trabajo flexibles y abiertos, a la colaboración y a los datos, empoderando a los empleados para situar a las personas en el centro de su estrategia.