Cómo colabora Microsoft en el crecimiento de una startup que planta bosques

La idea nació en España, en la falda polvorienta de la Cordillera Cantábrica. Los silvicultores ahora están trabajando arduamente para plantar miles de plántulas (como roble, nogal, cerezo y abedul) donde antes solo había campos y matorrales. Génesis es el nombre que le han dado al bosque.

Reforestum lo había pagado todo con 40 000 euros que cientos de entusiastas financiadores habían donado, ya que les había inspirado la audaz visión de la empresa de que los bosques podrían cultivarse desde una aplicación de smartphone, lo que permite a todos compensar su huella de carbono "en unos pocos clics".

Eso fue en la primavera de 2017. Pero hubo silencio durante un tiempo preocupantemente largo.

"Reforestum estuvo al borde de morir un par de veces. Estuve a punto de rendirme varias veces cuando mi vida personal y profesional se volvió bastante complicada", dijo a principios de este año el CEO y fundador Diego Sanz a sus patrocinadores originales.

"Siendo totalmente sincero, ni siquiera estaba preparado para llevar una empresa, pero tenía varias promesas que cumplir, y no era una opción rendirse. Conocí a un cofundador excepcional en un programa de MBA ejecutivo en una de las mejores escuelas de negocios del mundo en el que decidí comenzar y recaudé suficiente capital para que Reforestum tuviera una segunda oportunidad y creé un equipo increíble".

Cuatro años después, Reforestum ha florecido, ganando el respaldo de inversores angelicales, L’Oreal, y consiguiendo una subvención del programa Microsoft AI for Earth, además de unirse al acelerador Microsoft for StartUps, para plantar y proteger bosques en nombre de personas y empresas de todo el mundo.

Los usuarios (o "reforestadores", como los llama la empresa) ahora pueden participar en proyectos que abarcan millones de hectáreas a escala mundial (Génesis era un bosque de unos pocos miles de árboles), gracias a su asociación con Ecosphere +, incluida una extensión de 1,6 millones de hectáreas al Parque Nacional Cordillera Azul en el centro de Perú y la restauración de 23 000 hectáreas de selva tropical de turberas en el sur de Sumatra. Todos tienen la certificación de los mejores estándares en cuanto a carbono, biodiversidad e impacto social.

Transformar las compensaciones de carbono en métricas tangibles contribuye a aumentar la conexión del usuario con el papel vital de los bosques, que es lo que hace la plataforma Reforestum.

Las tablas de clasificación virtuales para cada bosque, y los perfiles corporativos públicos, revelan la pasión que algunos reforestadores virtuales sienten, sin duda, por el proyecto elegido. El promedio de emisiones de un adulto durante cinco años y medio es de 67 toneladas de carbono, el equivalente de lo que un usuario ha compensado protegiendo la selva tropical primaria en Perú.

"Nos ayuda a todos", explica Alban Bressand, cofundador y director de ingresos.

"Los beneficiarios inmediatos de este trabajo viven en los bosques que se están creando y cerca de ellos. Hay muchas comunidades en Perú e Indonesia cuyo hogar a la selva tropical y de la que depende su supervivencia. Reforestum proporciona restauración y conservación a gran escala de tierras boscosas junto con el esfuerzo de socios y consumidores conscientes".

Recientemente, Reforestum ha superado un hito clave: el segundo proyecto de forestación plantado en España en diciembre de 2020 cerca de las mismas colinas que el primero, pero esta vez con una financiación principalmente de corporaciones cuyo objetivo es cumplir sus objetivos medioambientales.

En el nuevo bosque de Calahorra de Boedo, una parte de 1,5 hectáreas reservadas para el Bosque Comunitario, donde los individuos compensan su huella, ahora está junto a 2,4 hectáreas plantadas por la división deportiva de pádel de Adidas, lo que proporciona un hábitat a los ciervos, los milanos de alas negras y los lobos.

Para que las empresas puedan ofrecer compensaciones a sus clientes o empleados, Reforestum tiene como objetivo escalar la distribución de créditos de carbono y las acciones forestales patentadas de Reforestum mediante una interfaz de programación de aplicaciones, o API. Al finalizar la compra online con marcas responsables, se puede entregar dicha compensación para conectarlos con los proyectos que apoyan a través de la plataforma Reforestum.

"Estamos desarrollando e integrando herramientas en torno a la supervisión, la elaboración de informes y la verificación del carbono almacenado en nuestros proyectos forestales, ya que cultivar la confianza entre todas las partes involucradas significa aumentar la transparencia", afirma Bressand.

"Utilizamos imágenes satelitales, que se analizan con IA y Microsoft Azure, para nuestros proyectos a mayor escala. De este modo, se supervisa el progreso que se logra en el área protegida y la expansión de los bosques a escala mundial. Podemos mostrar a las empresas y los consumidores un progreso tangible porque no es necesario que haya nadie en el terreno".

"Usamos imágenes satelitales que se analizan con IA y Microsoft Azure. De este modo, junto el trabajo de los auditores sobre el terreno, se supervisa el progreso que se obtiene en el área protegida y la expansión de los bosques a escala mundial, por lo que podemos rastrear y mostrar un progreso tangible a lo largo del tiempo a las empresas y los consumidores". – Alban Bressand, cofundador y CRO de Reforestum.